lunes, 8 de diciembre de 2014

Escalera de inferencia




Vemos a la señora obesa y diabética como una persona que no hace nada por cuidarse, y cuando miramos su desastrosa analítica confirmamos nuestras sospechas. De hecho, los obesos son gente que no se cuidan a pesar de las veces que les hemos dicho que deberían hacerlo. Y, además, no suelen ser conscientes del riesgo para su salud que su obesidad comporta. Pensamos que el tratamiento con pastillas no va servir para mucho, porque de la alimentación adecuada y el ejercicio ya ni hablamos, y creemos que es una paciente que terminará siendo tratada con insulina. Aún así, le daremos (?) tres meses más, le insistiremos en que haga dieta, le animaremos a andar y le haremos una analítica dentro de tres meses. Pero ya sabemos lo que va a pasar.

 Vemos al fumador que ha sufrido un infarto y sigue fumando como un irresponsable temerario y no entendemos para qué sigue acudiendo a consulta si no hace nada de lo que le mandamos recomendamos. Sentimos, que aunque nos dice que sabe que tiene que dejarlo, no lo dice muy convencido y, creemos, que lo dice para salir del paso. Sabemos, porque está claro, que en cuanto salga de la consulta se le olvidará todo lo hablado. "A este le entra por un oído y le sale por otro"  Si no pone de su parte para dejar se fumar, nosotros poco podemos hacer. Bueno, ya le ofrecemos apuntarse al grupo de deshabituación, le proponemos algunos tratamientos y le animamos, una vez más, a que lo deje explicándole los beneficios. A ver si hay suerte.

La escalera de inferencia es un modelo que explica cómo pensamos a veces. De todos los datos a los que nuestros sentidos tienen acceso, centramos la atención en algunos de ellos. Obtenemos información. A los datos seleccionados les añadimos significados, personales, culturales,.. y basándome en ellos hacemos suposiciones. Cuando las suposiciones se confirman nos hacen establecer conclusiones, que se van reforzando por la repetición y adquirir así nuestras creencias. Y en función de esas creencias actuamos. Lo que hay que tener en cuenta, es que la selección de la información a partir de los datos está filtrada por nuestras creencias. Lo mismo ocurre con los significados que atribuimos. Tenemos más facilidad para ver aquello que refuerza nuestras creencias, y establecer así un circulo vicioso. Y algo de ésto también hay en las profecías autocumplidas.
¿Os pasa a vosotros?

La ventaja de darnos cuenta de que eso nos pasa es poder tener más conciencia de mis pensamientos  juicios y de mis creencias. Existe la posibilidad de trabajar intentando dejar a un lado nuestras creencias y abordar el problema en cuestión, el no control de la diabetes, el no dejar de fumar, etc... subiendo por la escalera parándonos en cada peldaño y preguntándonos "Es esto que observo/pienso/creo/siento así o hay otra explicación?"

2 comentarios:

  1. La Vida es compleja ...
    Hace poco en un paseo con mi marido y algunos amigos, le decía a uno de ellos: "deja de fumar, tus pulmones te lo agradecerán" a lo que mi marido contestó "deja a X en paz, dejarlo tranquilo" ... luego me contó alguna cosa más de la situación y, me di cuenta de que, a veces, callada estoy muy guapa ...

    Nota: Me gusta tu blog, que lo sepas ... XD

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    1. Gracias Juana! La verdad que es muy difícil no funcionar así..pero es bueno ser consciente de que es algo que nos pasa. Nuestra percepción de la realidad...es (sólo) una y puede haber muchos matices si miramos bien.

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